Las sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS) son una gran familia de sustancias químicas sintéticas ampliamente utilizadas por toda la sociedad. Todas ellas contienen enlaces carbon-flúor, que son unos de los enlaces químicos más fuertes de la química orgánica. Esto significa que resisten la degradación cuando son utilizados y también cuando se encuentran en el medio ambiente.
La mayoría de las PFAS se propagan con mucha facilidad en el medio ambiente y se ha podido comprobar que contaminan las aguas subterráneas, las superficiales y el suelo.
Los Comités de Evaluación de Riesgos y Análisis Socioeconómico han apoyado la propuesta de Alemania de restringir el uso de ácido undecafluorohexanoico (PFHxA) y sustancias relacionadas.
El Comité de Análisis Socioeconómico (SEAC) ha adoptado su dictamen final sobre la propuesta de Alemania de restringir el ácido undecafluorohexanoico (PFHxA), sus sales y sustancias relacionadas. En junio de 2021 ya se emitió una opinión del Comité de Evaluación de Riesgos (RAC) para restringir estas sustancias dado que se consideran sustancias que pueden ser peligrosas para las personas y el medio ambiente.
Los PFHxAs son un subgrupo de sustancias perfluoroalquilo y polifluoroalquilo (PFAS). Se sabe que las sustancias PFHxA son muy persistentes y móviles. Son ampliamente utilizados en muchos sectores, como papel y cartón (materiales en contacto con alimentos), textiles como equipos de protección personal, textiles y prendas de vestir para el hogar, así como en espumas contra incendios.
El Comité apoya la restricción para usos donde no es posible minimizar las emisiones a través de otros medios, especialmente para usos en materiales en contacto con alimentos, así como en las espumas utilizadas contra incendios.
Se considera que la restricción de PFHxA es, en general, una medida adecuada para abordar los riesgos identificados y garantizar un nivel constante de protección para las personas y el medio ambiente en toda la Unión Europea.
La Comisión Europea se compromete a eliminar gradualmente todos los PFAS, permitiendo su uso solo cuando se demuestre que son insustituibles y esenciales para la sociedad.